ESTUDIOS DE SUELO

 ¿Qué es un estudio de suelo?


Un Estudio de Suelo, también conocido como Estudio Geotécnico, es un conjunto de actividades que nos permiten obtener la información de un determinado terreno.

Es una de las informaciones más importantes para la planificación, diseño y ejecución de un proyecto de construcción.

Distintos tipos de Suelo

Las expertos en Estudios de Suelos no están de acuerdo en decir que existen suelos malos o suelos bueno. Dirán que hay suelos más aptos que otros para la construcción

Dirán también que se puede construir en cualquier tipo de suelo.

Pero obviamente construir en un suelo malo (o menos apto) será más difícil y se necesitan sistemas de cimentación más complejos y costosos.

1. Los Suelos Granulares (Suelos Buenos)

Son suelos compuestos por gravas y arenas.

Este material puede estar compuesto por partículas de piedras pequeñísimas (pero posibles de ver a simple vista) y también se encuentran piedras más grandes y bolones.

Este tipo de suelos es más firme y amplifica menos las ondas sísmicas. También son suelos muy resistentes frente a las cargas que deben soportar.

2. Los Suelos Finos (Suelos Malos)

Este tipo de Suelo se componen por las arcillas y limos, que son una partículas pequeñísimas (tipo polvo) que pese a tener buena cohesión, sufren grandes cambios al contacto con el agua.

Po esta razón, su resistencia dependen de la humedad a la que estén expuestas. Por eso no son lo mejores suelos para fundar los cimientos de una edificación.

Una variable muy importante a considerar (y que un estudio de Suelo lo indica) es conocer si existen cuerpos de agua subterráneos y a qué profundidad.  

Los cuerpos de aguas subterráneos afectan y alteran el comportamiento de determinados tipos de Suelo.

En resumen podríamos decir que lo más recomendable es construir sobre un suelo resistente que cumpla todas (o la mayoría) de las condiciones descritas  de la siguiente tabla.

¿Para qué sirve un Estudio de Suelo?

El Estudio de Suelo tiene una función muy práctica y te permitirá conocer:

  • La características físicas, químicas y mecánicas del suelo donde estás pensando construir tu casa.
  • Su composición  estratigráfica, es decir las capas o estratos de diferentes características que lo componen en profundidad.
  • Ubicación de cuerpos de agua (Napa Freáticas) si las hay.
  • La profundidad a la que deberás de hacer las fundaciones (Nivel de fundación)
  • Planificar el diseño, cálculo y dosificación de las fundaciones de tu casa.

Lo que he visto es que cuando los constructores no conocen con exactitud las propiedades del suelo, se guían por lo que ha hecho el vecino respecto al tipo de fundaciones a realizar.

Y por lo general (en el mejor de los casos) diseñan y construyen unas cimentaciones sobre dimensionadas.

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente